12 de enero de 2013

OCTAVA ESCENA

La iglesia estaba repleta de gente, pero Marie no se encontraba esperándome como lo había hecho en los últimos seis domingos, la esperé hasta que llegó el sacerdote y se dispuso a comenzar la ceremonia; me sentí morir, y lo peor de todo fue cuando recordé que ella nunca me había dado su número telefónico, ¡qué tiempo perdido! Empecé a buscarla entre la multitud para ver si su horrible madre, que en ocasiones la acompañaba, se atravesaba en mi camino. Tampoco la vi.
Decidido a retirarme de tan horrendo lugar, me levanté de la banca y sin mirar a nadie, caminé sintiéndome el más pecador de todos cuando empecé a percibir las miradas que me seguían cargadas de acusación y culpas imaginarias. Creo que nunca más volvería a aquel lugar. Llegué a la puerta y levanté los ojos. ¡Qué libertad sentí! Y lo mejor de todo fue cuando logré ver a una hermosa mujer caminando por la acera de enfrente. Quise tomar el riesgo, me acerqué.

   -¿Se encuentra perdida? Le pregunté sin saber qué otra cosa decir.
  -No, pero sí busco a alguien. ¿Ha visto a un joven de estatura mediana, cabello negro y piel blanca? Preguntó.
   -No lo he visto, pero con gusto le ayudo a buscarlo -le respondí, ilusionado de quedarme más tiempo con ella.
   -Es un joven de unos veinte años, no sé por qué me dio cita en este lugar -intervino como si no le gustara ese ambiente religioso al que yo ya le estaba cogiendo rabia.
   -¿Lo dice por lo de la misa? -me reí.
   -Exacto -dijo, con la certeza de que ése no era su lugar de preferencia.
   -Tiene usted toda la razón, a mí me pasa igual -sentí un alivio maravilloso en el estómago.
   -¿Se molesta si le pregunto su nombre? -disparé.
   -Mucho gusto, me llamo Alice -me extendió el brazo con mucha seguridad, me miró con una sonrisa en los ojos que tuve la fortuna de descubrir a través de sus espejuelos; se veía como la mujer más interesante del planeta-
   -¿Le molesta si la invito a un café mientras espera a su amigo? -le dije señalando una cafetería que se encontraba en la otra esquina de la iglesia.
   -No hay ningún problema -me respondió para sorpresa mía, con mucha seguridad. Me sentí excitado al ver en ella una verdadera mujer.

   Estuvimos hablando por media hora, su amigo nunca llegó a la cita y aproveché mi suerte para ir con ella a un lugar mucho más tranquilo, un sitio lejos de aquel ambiente contaminado de Iglesia. Ella accedió.
   Caminamos lentamente, ella llevaba puesto un jean desteñido, unas sandalias, una camiseta blanca que no traía ningún tipo de marca, el cabello agarrado y sus gafas. Su cara tenía la seriedad de una intelectual, tenía unos dientes perfectos y labios delicados, no lucía ningún tipo de maquillaje, era una mujer sencilla que transportaba una energía liviana. un espíritu en calma. Despertó mucha curiosidad en mí; creo que por primera vez me encontraba al lado de una mujer, sin estar pensando en alguna estrategia para llevarla a la cama, aunque en algún momento de mi caminata sí se me ocurrió que podría ser algo demasiado interesante y excitante a la vez, pensé que con un estilo como el de ella, no sería necesario hacer tantos gastos previos, ni decir tantas palabras rebuscadas. ni consultar versículos de ninguna Biblia para llevarla a la cama, ni juramentos, ni fantasías de bodas irrealizables y mucho menos presentarla a mi madre; Alice aparentaba ser una mujer con decisión, del estilo de quien no necesita ningún tipo de explicación ni justificaciones para vivir la vida, era simplemente una mujer madura. Eso fue lo que me inspiró.
Ese día me enteré que era filósofa, que trabaja como asesora de tesis de estudiantes de diferentes universidades y que uno de sus alumnos preferidos era el chico de la cita que debí entregarle un material importante para su aprobación; confirmé que siendo católica por familia, no creía mucho en religiones y que le gustaba la vida más pragmática y real, todo lo que se pudiera tocar y sentir. Lo que corroboraba mis primeras pasiones y me hizo apreciarme más seguro. Me dijo que cuando su esposo no se encontrara me invitaría a su casa. Eso me sonó a amantes y me excitó. también me dijo que tenía una teoría muy interesante que había plasmado en su libro titulado: "Libertad, camino hacia la felicidad". Definitivamente, Alice era una persona interesante, lástima que no pude seguir la conversación; ella no podía continuar, era una mujer ocupada, pero me prometió que pronto me llamaría. No quiso dejarme su teléfono, creo que desde el comienzo ella tomó el control de la situación.



Bueno, al menos le interesó la mujer xd.
Adiós :-). 
PD: He notado que mi ordenador comienza a tener muchos fallos (ya no quiere prender, se alenta, se apaga repentinamente). Entonces.. quiero informaros que si llego a tardar más de lo normal en subir es por eso (como hace unos instantes que se me descontroló el escritorio :@). Pido disculpas de antemano.

5 comentarios:

  1. Oh que genial me encanto,esta bien interesante y emocionante la historia me fascina
    bueno sube cuando puedas
    cuidate y gracias por leer mi fic

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    1. :3 Gracias a tí por leer y comentar mi fic xdd.

      Tú también cuídate.

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  2. Otra conquista de Tom :-/
    yo creo que si seran amantes..
    Y espero que tu compu se arregle paa que subas...
    Siguelaa prontoo.. Bye cuidate :D

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    1. xdd Bueno, eso ya se verá más adelante. Jenni ;-).
      Gracias por tus buenos deseos a mi ordenador xd.

      Tú también cuídate.

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  3. o post que eu ler e ver no seu blog é moi informativo e agradable, fixo un gran traballo e eu dándolle 10 de Dec números para iso, mantelo continuar e espero que vai facer un traballo máis difícil de facer informativo e interesante publicar a este blog
    Go To modu

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Nos vemos en la siguiente escena.
Gracias :3